Los beneficios de estas alfombras hechas a mano, son de gran valor. Lo ordinario se convierte en algo extraordinario.

Por supuesto, cumplen su misión como aislantes del suelo, tanto del frío como del calor, dependiendo de los materiales con los que estén hechas.

También está la energía de los objetos realizados a mano, y con telar, un procedimiento antiguo que garantiza su longevidad.

El hecho de que estén realizados a mano por una artista, también significa que puedes disfrutar de una energía que es cálida y amorosa, que tiene que ver con la intención con la que están hechas, hilo por hilo.

Por otro lado, la intención está particularmente centrada en el beneficio de todos los seres sensibles, con lo que podrás disfrutar de un plus de beneficios a nivel más sutil.

Puesto que el oficio de tejer es altamente meditativo, te encontrarás bien con estos objetos, que están creados desde el despertar de la conciencia, es decir, siendo conscientes en todo momento de lo que se está haciendo.

Hay una diferencia fundamental, respecto a las alfombras fabricadas a máquina, y es que no desprenden esta energía en ningún momento.

También es verdad que hay que ser sensible a esto, ya que vivimos en una sociedad dónde se valora poco este hecho tan singular porque hemos perdido el contacto con lo artesano. Pero… ¿no es mucho más nutritivo y agradable, alimentarse de un buen plato casero, hecho con amor, que de una comida rápida, con la actitud de usar y tirar?.

Aunque sobre gustos no hay nada escrito, y somos muchos y variados para elegir lo que nos conviene en cada momento, no es comparable, y sino podéis comprobarlo!!!